Sólo hay una manera de recuperar la libertad de que
gozaban Adán y Eva en el paraíso: ¡conocer a Dios y Su Verdad! Los que hemos
recibido a Jesucristo como nuestro Salvador y Rey ya hemos recobrado el Paraíso
en nuestro corazón. Dios nos ha perdonado los pecados y nos ha dado paz, amor y
felicidad como nunca conocimos. ¡Ya tenemos el Paraíso Terrenal en nuestros
corazones! ¿Te gustaría vivir en el Edén? ¿Disfrutar del Paraíso, de la
libertad y de todas las maravillas y placeres que Dios nos ha dado para que los
disfrutemos, de toda Su creación? Pues es posible; no tienes más que dejar
entrar a Jesús en tu corazón. ¡Él es quien creó el Huerto del Edén! ¡Recíbele
en tu corazón y estarás allí, porque tendrás a Jesús en el corazón! ¡Y
convertirá tu corazón en un jardín del amor de Dios! ¡Allí siempre será de día,
habrá sol y serás limpio e inmaculado, puro y perfecto a los ojos de Dios! ¡Y
una vez hayas encontrado el Paraíso de Dios, querrás llevar allí a otros para
que puedan experimentar también sus alegrías! ¡Y puedes hacerlo! ¡Puedes llevar
el Edén a cada corazón que reciba a Jesús si les hablas a los demás de Él y
ellos le piden que entre!
No hay comentarios:
Publicar un comentario